martes, 16 de octubre de 2007

Aldemaro Romero, músico invaluable

Músico autodidacta, pianista, arreglista, director y compositor, creador del ritmo la Onda Nueva y de sonidos que nos llevan a lo más profundo del ser venezolano, este es, Aldemaro Romero: valenciano nacido el 12 de marzo de 1928 y fallecido en Caracas el 15 de septiembre de 2007. Participo en calidad de arreglista, compositor y director invitado de las principales orquestas de Venezuela, entre ellas, La Orquesta Sinfónica de Ciudad Guayana, la Orquesta Sinfónica Gran Mariscal de Ayacucho, Orquesta Sinfónica Simón Bolívar y la Orquesta Sinfónica Venezuela. Se destacó en diversas presentaciones en la Sala Ríos Reyna y la Sala José Félix Ribas. El Teatro Teresa Carreño fue el recinto escogido para la celebración del Festival Onda Nueva en 1997. “El Maestro”, como era llamado por amigos y alumnos, no solo se desenvolvió en la música popular venezolana. Creó la Orquesta Filarmónica de Caracas en 1979, de la que fue su director fundador, y tiene un sinnúmero de obras sinfónicas, de cámara y coral-sinfónico, por ejemplo: Toccata Bachiana y Pajarillo Aldemaroso, Concierto Criollo para Arpa y Orquesta, Suite Andaluza, Ave María. Fue columnista del diario Notitarde de Valencia y de otros como el diario el Mundo, además de contribuir a la historia con diversas ediciones musicales. Aldemaro Romero deja un legado invaluable en la música y en el arte. Como escribió Manuel Rodríguez Cárdenas (publicado en el programa de mano de la OSV del 13 de mayo de 1993): “El día que Aldemaro muera, correrán por las calles los fariseos con la cabeza cubierta de boñiga. El Pueblo, el pueblo entero, lo despedirá en silencio… Al fin –en paz- podrá escucharse el treno de un hombre que no tuvo tiempo de llorar. Treno de música con la cabeza en alto. Y pasará su sombra, por fin en paz, hacia la paz perpetua”.

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